2021, el año de la aceptación

2020 fue el año en el que el tiempo se paró para tener que mirarnos a nosotros mismos. Una vez descubierto quiénes somos, 2021 se ha convertido en el año que nos aceptamos. Vemos la luz al final del túnel y el tópico de siempre se cumple: “Vendrán tiempos mejores”. Merece la pena mirarle a los ojos el presente, sabiendo que aceptas el pasado y vives para escribir el futuro. Cuestión de tiempo.

El año llega a su fin. Hay algo místico en estos días. Como un deseo de reconciliarnos con lo que hemos sido y reafirmarnos en lo que queremos ser.

Cada año vivimos una montaña rusa de emociones fuertes. Eso es lo verdaderamente importante, mirar al presente con ojos de plata, para que el pasado permanezca en una fría hoja de papel.

¿Dónde está el futuro? Escrito en el grafito de la ilusión. Depende de nosotros si ese grafito se convierte en tinta para siempre. Los pequeños detalles nos hacen grandes en las decisiones importantes. Grandes, porque nos hacemos valientes cuando queremos huir. Importantes, porque merece la pena recordarlos.

2019
2020

2021 también es este banco, una ilusión y sueños por cumplir que desconocía dentro de mí. 2021 me regaló vivir por dentro una película de Hollywood, gracias al inmortal Wes Anderson que con precisa meticulosidad dibuja planos simétricos perfectos, llamativas paletas de colores y cuentos increíbles. Algunos dirán que soy un poco intenso, pero guardo un objeto bastante vulgar como recuerdo de aquellos días que viven en mi memoria.

El cambio de paradigma tras la pandemia hace mella en nuestros huesos. Todo está por llegar y es mejor estar preparados para todo lo que pueda venir.

Cada día que pasa estoy más cerca de quien soy. Por eso trato de reconciliarme con quien he tenido que ser, para así poder perdonar a quien nunca fui. En este banco, bajo un sol radiante que cura mi corazón, donde estoy más cerca de quién quiero ser.

Feliz despedida del 2021 y feliz entrada del año 2022 que está por descubrir.

¿Con qué nos sorprenderá esta vez?

Rubén Losada Alonso
Rubén Losada Alonso

Dame un tema que no conozca y haré todo lo posible por conocer algo de ello. Si Albert Camus es uno de mis referentes periodísticos y vitales, Wes Anderson hace lo propio en el cinematográfico y espiritual. Participé en una de sus películas y para mí es un sueño cumplido. Un día me definieron como crítico y ponderado, así que dicho quedó. Nací en Leganés y mi corazón está en Castilla y León. Me gusta estar en permanente contacto con la actualidad informativa, conocer y aprender cada día y ser un poco menos ignorantes que ayer.

Find me on: Web

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *